Tu futuro es hoy. Claves para crear tu destino

Tu futuro es hoy es una brújula para que cada lector dibuje su propio camino hacia el éxito. Y digo propio, porque no hay una definición universal del éxito. Es personal. Cada uno de nosotros definimos cuál es nuestro éxito. Este libro contiene la inspiración para que cada quien defina la suya.

robot mirando al futuro tu futuro es hoy
«Cuando no tienes claras tus metas te conviertes en una veleta. Cuando te sientes bien haciendo algo, estás en el camino correcto». —Laura Chica y Francisco Alcaide.

TU FUTURO ES HOY.  40 claves para crear tu destino. Francisco Alcaide y Laura Chica. Alienta, 2014.

 

Francisco Alcaide y Laura Chica proponen en este texto un  modelo propio de desarrollo personal que han denominado  MDP (Modelo de Desarrollo Personal), que desarrollan en cuarenta claves (ver adenda al final de este artículo).

Cada una de estas claves se tratan en otros tantos capítulos del libro. Estos van desde la Vocación, las Metas y las Motivaciones al Sexo como generador de Felicidad, pasando por cómo desarrollar el Optimismo, gestionar las Emociones y Pensamientos, y honrar los Valores.

Tu futuro es hoy. Por qué, cómo… Y acción

 

El desarrollo de estos capítulos es homogéneo, iniciándose con preguntas encaminadas a conocer el por qué ( la causa) y el cómo (el método). Conocidos éstos, el siguiente escalón es un paso a la acción (el qué).

En definitiva: pregúntate qué y con qué cosas disfrutas.

FRANCISCO ALCAIDE y LAURA CHICA

Al final de cada capítulo se ofrecen cinco claves concretas para poner en práctica lo aprendido y llevar a cabo lo que se quiera cambiar. Algunas de estas claves propuestas por Francisco Alcaide y Laura Chica, requieren de mucha reflexión. Son preguntas que nadie puede responder por nosotros: ¿Quién eres? ¿Qué quieres? ¿Cuáles son tus miedos?…

Se completa el capítulo con cinco libros recomendados en cada una de las áreas que se desee mejorar.

En nuestro desarrollo personal no hay recetas mágicas ni es gratuito.

FRANCISCO ALCAIDE y LAURA CHICA

Tú futuro es hoy, ahora. No mañana. No es por tanto de aplicación aquella vieja (aunque siempre vigente) máxima, que dio título a un inolvidable relato de Mariano José de Larra, Vuelva usted mañana.

ADENDA

En junio de 2019 se ha publicado la sexta edición de Tu futuro es hoy, ampliada y actualizada. Las iniciales 40 claves para crear tu destino, son ahora 46. Incluye también un prólogo de Eva Collado, consultora estratégica de Capital Humano.

La necesidad de compartir

la necesidad de compartir

En la Cumbre Tecnológica del G8 sobre Internet celebrada en 2011, le preguntaron a Mark Zuckerberg, el creador de Facebook, acerca del crecimiento de la red social y de la influencia que iba tomando. Le habían preguntado, en realidad, por la tecnología que él había desarrollado. Zuckerberg, sin embargo, sorprendió a todos con su respuesta:

Lo que identificamos fue algo en común que tenemos todos los seres humanos: la necesidad de compartir.– Mark Zuckerberg 

La inesperada respuesta del responsable de Facebook, me  lleva a dos reflexiones.

  1. Las dificultades que tenemos todos para no hacer suposiciones.
  2. Existe un sentimiento común que todos deseamos:conectar con los demás.

Las suposiciones

Muchas veces no nos damos cuenta de que nuestros pensamientos están derivados de suposiciones. Estas suposiciones también las expresamos verbalmente o nos las decimos en nuestro diálogo interior. Incluso las expresamos con nuestro lenguaje no verbal.

Suponemos hechos que no tienen por qué haber ocurrido. Sacamos conclusiones acerca de lo que otra persona puede estar pensando. Si ya es difícil controlar nuestro diálogo interior, lo es mucho más conocer el que mantiene el quien tenemos enfrente.

Y una más, quizás la más habitual. Suponer que la otra persona ha escuchado y entendido exactamente lo que hemos dicho. La misma palabra (o una misma expresión) puede tener para dos personas, significados completamente diferentes. Hechos tan simples como éstos, pueden dar como fruto malentendidos, resentimientos y alejamientos, cuando no ser el origen de situaciones más graves.

Si estas situaciones son habituales en nuestro mundo físico, lo son cada vez más en el mundo virtual, dado el aumento de nuestras conversaciones en las redes sociales. Hay un empeño en mantener, por ejemplo, por wasap conversaciones de calado, o de importancia para nuestras relaciones. ¿Qué es lo que ocurre? Pues que una respuesta se monta sobre una pregunta anterior. O que un icono sea malinterpretado. O que no se espere a la respuesta de la otra persona.

Estas son, en general, conductas no deliberadas. Pero que pueden dañar la autoestima. Y una autoestima dañada reduce la posibilidad de establecer un buen contacto.

No considero, sin embargo, una conducta no deliberada, sino todo lo contrario, otra moda. Las rupturas sentimentales, o de cualquier otro tipo, con un simple y lacónico mensaje de wasap.

La necesidad de conectar

La conexión no consiste en que uno gane la partida.

Es una forma de mantener la integridad, de alimentar la creciente autoestima y, a la larga, de fortalecer relaciones con uno mismo y con los demás. –Virginia Satir

Virginia Satir, es una reconocida terapeuta norteamericana. Habla de cómo conectar en el  libro En contacto íntimo (Neo Person, 1988). Este texto es tan corto en número de páginas como intensas son la reflexiones que contiene.

Para conectar, se requieren dos personas a la vez y tres partes. Cada persona está en contacto consigo mismo. Al mismo tiempo que trata de establecerlo con la otra persona. Ésta, a su vez, está sumida en su propio diálogo interno. Ambos están, además, expresándose a través de su lenguaje no verbal, acorde o no con lo que expresan verbalmente, o lo que, íntimamente, están sintiendo.

Virginia Satir ofrece, en consecuencia, un mapa para el establecimiento del contacto:

  1. Invitar a conversar
  2. Colocarse a la misma altura visual y al alcance de los brazos
  3. Estar preparado para arriesgarse a sacar lo que tienes dentro
  4. Expresarse en primera persona
  5. Hacer preguntas para obtener la información que no se posee
  6. Considerar todas las dificultades como oportunidades

Por lo tanto, indagar sobre cuáles son nuestras habituales suposiciones, es un primer paso para cambiar el ambiente. Y, después, conectar.

 

Referencias:

La historia del fundador de Facebook la he leído en el libro Brandoffon. El branding del futuro, Andy Stalman, Gestión 2000, 2014. Andy Stalman es un experto en marketing de marca.

Foto: De la exposición de trabajos de alumnos de la Escuela de BBAA Pedro Almódovar.

El juego interior. La lucha contra nosotros mismos

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Elisa Aguilar es una leyenda del baloncesto femenino español. Jugó como base en varios equipos españoles, en la NBA Femenina y en el Spartak de Moscú. En 2013 formó parte de la Selección Española de Baloncesto Femenino que se proclamó Campeona de Europa.

Coincidí con Elisa Aguilar en el  5º Congreso de Liderazgo y Talento Femenino, en el que ambos éramos ponentes. Cuando nos intercambiamos las tarjetas, me manifestó su agrado por el trabajo que con ella había realizado un coach.

Hasta ese momento sólo se habían preocupado de mí de hombros para abajo, me dijo Elisa.

Con esta gráfica explicación, la jugadora del baloncesto, afirmaba haber trabajado con un coach en la doble vertiente de este término. Y nada tiene que ver el uno con el otro:

  • Con su coach/entrenador, en su calidad de deportista profesional (o sea, de hombros para abajo). Un entrenador al uso que trabajó con ella su juego exterior.
  • Con ella como persona (de hombros hacia arriba). O sea, con un coach con el que trabajó su juego interior.

El juego interior contra nosotros mismos

El juego interior es la piedra de toque. Y no hace falta ser deportista para que tengamos juego interior. Es el diálogo que mantenemos con nosotros mismos. Y del que no somos conscientes. Cada minuto. No es un diálogo siempre piadoso. No siempre benévolo. Aprender a hablarnos a nosotros mismos es una tarea a la que dedicamos poco tiempo y muy poco esfuerzo.

Nuestro diálogo interior es, simplificando con una imagen casi infantil, un diablillo colocado en uno de nuestros oídos y un angelito en el otro. El primero nos machaca, el segundo nos refuerza. Entre lo que uno dice y el otro rebate nos pasamos la vida entera.

En la década de los 70 del siglo pasado, después de haber capitaneado el equipo de tenis de la Universidad de Harvard, Timothy Gallwey trabajó como monitor de este deporte, mientras disfrutaba de un año sabático en sus estudios de pedagogía.

La observación del rendimiento de sus jugadores, llevó a Gallwey a plantear que

Cada juego consta de dos partes, un juego exterior y un Juego Interior. El exterior se juega contra un adversario externo. El Juego Interior tiene lugar en la mente del jugador, y se juega contra obstáculos como la falta de concentración, el nerviosismo, las dudas sobre sí mismo y la excesiva autocrítica. –Timothy Gallwey

La tesis es que no se puede lograr el dominio de ningún juego sin prestar atención a las habilidades del juego interior. Sobre esta base nació El Juego Interior del tenis, un libro que cambió el modo de entender este deporte. Aunque fue recibido con no poco recelo por jugadores y entrenadores, construyó las bases del coaching.

Cuando nos enfrentamos a un problema o una situación inesperada o que no nos satisface (o sea, el adversario externo), en nuestra mente comenzamos a jugar un partido contra los obstáculos. Mucho de ellos son puramente imaginarios. Simplemente, no existen. Otros, los hacemos más grandes que lo que en realidad son. Nos alejamos así de encontrar una solución,  centrados como estamos en esos obstáculos.

Hay que ganar el partido que jugamos de hombros para arriba. Una vez ganado, no habrá partido que no podamos ganar, sea de tenis o dar solución a un problema.

El silencio que conviene a nuestro juego interior

Cuanto te he contado está magníficamente contado en el libro Rafa, mi historia (Urano, 2011), las memorias de Rafa Nadal escritas por John Carlin. La estructura del libro alterna la historia personal y deportiva del tenista, con los recuerdos que Rafa tiene de la final del torneo de Wimbledon de 2008, que jugó contra Roger Federer.

En realidad, lo que narra de aquella final es el diálogo interior de Rafa, su juego interior,durante todo aquel memorable partido. Y como consiguió acallarlo para escuchar solo el silencio de la pista central de Wimbledon. Es toda una lección, una maravillosa lección de como Nadal pugnó con su mente.

En este vídeo, John Carlin y Rafa Nadal hablan, entre otros cosas, de aquel partido.

Como diría Elisa Aguilar, lo más importante es trabajar de hombros para arriba.