¿Cuál es tu primer paso? Contra la rutina diaria

¿Cuál es tu primer paso al comenzar el día? ¿Cúal es tu primer paso para cambiar lo que no te gusta, pero sabes que has de cambiar?

hormas de zapatos, cuál es tu primer paso

La Plaza Mayor de la ciudad donde nací tiene soportales laterales. A los soportales de un lado se les conocía como  «los tristes”. Los del lado opuesto eran «los alegres”. Ese calificativo aludía a que por los alegres iba todo el mundo. Los tristes estaban casi siempre vacíos.

Nos acostumbramos a hacer siempre las mismas cosas. A caminar por donde caminan los demás. Nos sentimos cómodos, seguros con lo que no nos es familiar. Abandonarlo nos asusta, porque entramos en lo desconocido.

¿Comienzas el día con la misma rutina?

 

    • Cuando sales de tu casa, ¿lo haces siempre por la misma acera? ¿Y cuándo regresas?
    • En clase, ¿te sientas siempre en el mismo lugar, con los mismos compañeros?
    • Y en el trabajo, ¿saludas a las mismas personas de la misma manera, a diario?

Nuestra resistencia al cambio es, en realidad, el miedo a lo desconocido. Este miedo forma parte de nuestra naturaleza. Pero, a la vez, los seres humanos somos exploradores por naturaleza. Qué sería de nosotros si no tuviéramos contradicciones.

¿Cuál es tu primer paso?

Lo que necesitamos lo tenemos dentro de nosotros. El sencillo gesto de cambiar de acera, nos cambia la perspectiva. No sólo nos hace ver las cosas de manera diferente.  Supone además una ruptura con lo que estamos acostumbrados a hacer. Es una nueva actitud. Es estar dispuesto a incorporar nuevos aprendizajes. Probar y ver si las nuevas posibilidades nos valen o no. Y, si nos sirven, incorporarlas y hacerlas nuestras. Hemos roto el círculo vicioso de nuestras rutinas.

Cambiar es un proceso paulatino. Necesita tiempo. El primer paso es el más importante de todos. El que nos coloca en el camino. Es también el más difícil. Conseguirlo es, si me permites la expresión, un chute de autoestima. Pero una vez dado, nada nos podrá parar.

Pasados los años, nadie dice que los soportales de la ciudad donde nací sean alegres o tristes. Los que antes eran los alegres, lo siguen siendo: camina mucha gente por ellos. Pero los tristes se han convertido en alegres igualmente, porque alojan las terrazas de nuevos bares, atestadas en verano y de paso obligado en invierno.

Cambiar algo nuevo cada día

El primer proceso de coaching en el que yo fui cliente, pacté con mi coach un pequeño plan de acción. Algo muy sencillo. Lograrlo me dio la confianza suficiente para alcanzar metas más complicadas. Es por eso que con mis clientes suelo pactar un primer plan de acción que suponga un cambio muy pequeñito. Un primer impulso que les lleve a la consecución de sus metas. Que ganen confianza. Como si se lanzaran a una piscina.

set de maquillaje cual es tu primer paso

Apliqué pues aquella misma técnica cuando fui coach. Recuerdo una chica con la que realicé un proceso de coaching. Estaba sin trabajo. Cuando salía a buscarlo —y lo hacía a diario— no se maquillaba. Me decía que maquillarse era para «las que tienen trabajo».

No fue fácil cambiarle esa creencia. Así que su primer plan de acción fue maquillarse para salir a buscar trabajo. En un mes, encontró trabajo. Pero no porque fuera mejor profesional ni porque fuera maquillada, sino porque su actitud cambió. Maquillarse hizo que su autoestima se disparara y enfrentara las entrevistas de trabajo segura de sí misma. Encontró trabajo.

Lo verdaderamente importante es que estemos dispuestos a cambiar algo nuevo cada día.

¿Cuál va a ser tu primer paso?

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La voluntad es el motor del cambio

Me declaro fanático de las palabras que comienzan por el prefijo latino “co”. Me encantan porque me remiten a conceptos como unión, ensamblaje, participación. ¿Será por esto por lo que me gusta tanto el juego de Lego?

Este juego es una precisa y preciosa metáfora de la vida. Piezas que encajan perfectamente, con las que cimentar, crear y montar todo aquello que queramos construir.

Entre esas palabras que comienzan por «co», destaco tres: confianza, coherencia y congruencia. De la confianza ya he hablado en otras notas de este blog. Hoy quiero centrarme en la congruencia.

En geometría se dice de que dos figuras son congruentes cuando tienen el mismo tamaño y la misma forma, aunque su posición y su orientación sean diferentes. Los matemáticos no dicen que sean iguales, sino que están de acuerdo.

La voluntad es el motor del cambio

Ser coach es una actitud, una filosofía de vida. Para ser congruente como coach, tengo que serlo primero como persona. Si quiero ayudar a otras personas en su proceso de cambio, yo debo cambiar primero. El cambio ha de comenzar por uno mismo. Esta es mi manera de ser congruente, de estar de acuerdo con mi cliente, estándolo primero conmigo.

D´Arte Coaching, la escuela en la que me he formado como coach, tiene una frase como eslogan. Con ella, todos mis formadores comenzaban sus clases:

Sé tú el cambio que quieres ver en el mundo.

GHANDI

Este pensamiento de Ghandi es una permanente invitación a revisarnos. A bucear en nuestro interior. Sin que no se nos olvide ni un solo día la necesidad de realizar nuestro propio viaje interior. Ser, en definitiva, los artífices de nuestro cambio, para extenderlo después como una mancha de aceite.

Cambiar es empezar a pensar de manera distinta en las mismas circunstancias, para lograr resultados diferentes.

— RAFAELA SANTOS, psiquiatra

El cambio es una puerta que se abre desde dentro

Nuestra manera de pensar no puede ser algo estático, ha de evolucionar.  Y para eso es necesario cambiar la perspectiva con la que miramos. Esto me lleva directamente a explicarte cómo hago mi trabajo como coach. Abro perspectivas a mi cliente. Una invitación para que sea él el artífice de su propio cambio.

El cambio es una puerta que tenemos que abrir desde dentro. Por eso solo podemos abrirla  voluntariamente. La voluntad es el motor del cambio. Voluntad para aprender cosas nuevas.  Voluntad para cambiar actitudes. Voluntad para adquirir nuevos conocimientos personales.

Ley es también obedecer a la voluntad de uno.

CLEMENTE DE ALEJANDRÍA

¿Por qué no eliges ser tú ese uno? Lo bueno es que no tienes que cambiar cada cuatro años, como si fueras un candidato a tus propias elecciones. Lo mejor es que puedes hacerlo a diario.

 

Tengo una visión, el camino a la Marca Personal

Tengo una visión. ¿ En que consiste la visión? La visión es saber hacia dónde quieres ir. El viaje hacia qué quiero hacer y quién quiero ser. Pero ¿de qué sirve tener un sueño si no hacemos todo lo posible para realizarlo?

Si no hay acción, no hay visión. Y la acción requiere compromiso: la firma de un contrato con uno mismo. Los sueños por sí solos no tienen movimiento. A los sueños hay que ponerles alas para que vuelen y ruedas para que aterricen.

La historia que te cuento a continuación es un excelente ejemplo del proceso de definición y construcción de la Marca Personal. El viaje de Beatriz.

Tengo una visión

Beatriz va vestida de rojo. 

¡Estoy así de expansiva! Aún no soy consciente. ¡Lo hemos hecho nosotros!— me dice. Y sonríe abiertamente.

«Quiero ayudar, pensó un día Beatriz, eso es lo que quiero hacer en la vida». La idea de «ayudar» hizo que Beatriz abandonara su trabajo y se hiciera coach. Esa fue su visión. Y comenzó su aventura. Aventura que ha culminado con la celebración de Expocoaching, la primera feria española dedicada al coaching. Aunque ella utiliza una metáfora que invita a pensar que no está sola.

—Hemos roto aguas— dice.

Beatriz Sanz se refiere a ella y a su marido, propietario de la Yeguada Caballero. Ambos imparten formación en coaching y liderazgo, ayudados por los caballos.

Es domingo 27 de abril de 2014, y la primera edición de esta Feria dedicada al coaching, está muy cerca de concluir.

No sólo ha sido para coaches, la hemos abierto al público. Había que decírselo a la sociedad— comenta Beatriz.

Los emprendedores escriben sus propias historias o reescriben las que han contado otros. Beatriz ha reescrito una historia que le habían contado. Después de asistir a las Jornadas de Coaching que organizó la Escuela D´Arte Coaching el pasado verano de 2013, pensó que «esto puede hacerse aún más grande. Los coaches necesitamos un lugar donde hacernos sonar. Que el coaching tenga su espacio y se difunda», recuerda Beatriz. Y compartió ese pensamiento con su marido.

Cuando compartes una visión, todo fluyedice sonriendo complacida.  

Nada sin pasión

Al «miedo escénico» que dice haber sentido la promotora de Expocoaching, se sumó la euforia.  El miedo y la euforia como emociones opuestas. Me confiesa que no sintió «ni tristeza ni enfado», a pesar de los muchos días de incertidumbre, de trabajar de siete de la mañana a doce de la noche. Una gestión emocional muy complicada. Para solucionarla, se decía, mirándose al espejo: «esta situación me tiene que hacer más fuerte».

Y es entonces cuando apareció la palabra mágica: pasión. Pasión y propósito unidos.

Nada sin pasión

Es esa misma pasión la que la alienta para comenzar a pensar en expandirse hacia Latinoamérica.

La historia de Beatriz es el relato del camino  («del que hay que disfrutar»)  hacia un sueño. Hacia el cumplimiento de una visión, el camino hacia la definición y desarrollo de la Marca Personal. La historia de Beatriz es la de tantas  y tantas personas que un día deciden dejarlo todo para perseguir un sueño.

 

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